LTNSM habla de la construcción de mundos y de la obra como mundo. Sus personajes habitan posibles suelos y cada suelo es condición de posibilidad de otros puntos de vista, como capas que van corriéndose y permitiendo la aparición de realidades nuevas cada vez. Son entornos o burbujas que construyen los gestos, los movimientos, la sonoridad, los espacios y los particulares modos de ver el mundo. Los personajes buscan su suelo, sus cuerpos, su espacio poético, su metáfora, sus anclajes, sus imágenes, su manera de contar, su narración. Lo intangible se vuelve tangible, lo invisible visible. Los personajes, Carrizo y Zulema, se trasladan por esos lugares en un juego en la frontera realidad / ficción. Hay etapas o capas que Zulema y Carrizo van atravesando. Buscan a Héctor, un tercer personaje desdibujado. Recorren el mapa que es la obra y el mundo cada vez re-convertido, re-versionado. Esta obra está inspirada en su composición en la obra del fenomenólogo alemán Edmund Husserl. El método fenomenológico como modelo en la construcción del mundo de la obra, en la que justamente se habla del mundo.