LA PACIENCIA (fatídica sindical)

En un centro de cuidados intensivos, entre sueldos paupérrimos y jornadas extenuantes, dos enfermeras de turno noche cometen un error que deviene en fatalidad. Al llegar la jefa de enfermería de una protesta sindical, descubre con espanto el hecho. En ese limbo entre la vida y la muerte, emergen de ellas, en tono de comedia negra, sus miserias y el desgaste psíquico que conlleva una existencia consagrada al cuidado de personas.

La Paciencia fué declarada de interés social y cultural por la Legislatura porteña.

"Con atrevido y eficaz humor negro no exento de realismo mordaz, Macarena García Lenzi plasma en su obra “La paciencia” un tributo a las enfermeras... Diversión, pero con trasfondo serio y comprometido. Párrafo aparte para las tres intérpretes, fieles a sus personajes hasta en los detalles más sutiles, sin soltarlos nunca y sin buscar la fácil complicidad de la platea."

Moira Soto, Infobae

"Brillantísimas actuaciones, con humor pero con toda la carga dramática que significa tener que hacer un trabajo que no tiene el necesario reconocimiento"

Víctor Hugo Morales, Las Mañana con Victor Hugo

"Qué placer cuando ves buen teatro. La paciencia me impactó por las buenas actuaciones, por la obra en sí misma, por los temas que trata. No dejen de verla."

Osvaldo Quiroga, Otra trama - TV pública

"Con este material, donde la crueldad puede ser cotidiana y feroz, la puesta logra las carcajadas de un público que por el boca a boca colma la sala cada sábado a las 20 horas."

Patricia Chaina, Página 12

"Un oficio olvidado y de mujeres que visibiliza y homenajea la comedia negra La paciencia, la obra de Macarena García Lenzi que se convirtió en el nuevo suceso del teatro independiente. Hay risas porque los diálogos son desopilantes, pero bajo esas risas subyace lo incómodo."

Mercedes Funes, Infobae

"La paciencia es un espejo adonde Argentina se mira y se ríe de sí misma, de que está terminal... Con excelentes actrices, la obra de Macarena García Lenzi muestra que el país estará hundido pero nuestro gran grotesco rioplatense sigue rutilante."

Elsa Drucaroff y Alejandro Horowicz