Los dientes del perro

La historia es simple. De un pasado que pesó y pasó. Que se presenta en el presente. El recuerdo que vuelve para reparar. Una fiesta y la sorpresa. El relato que revela el recuerdo de una historia vieja que queremos olvidar, y para eso, qué mejor que revivirla. Revisarla. Repararla. Para estos payasos, es la oportunidad de convertirse en interpretes. Eligieron este sainete, porque pueden resoñarlo, remanyarlo y tratar de revelarle una reversión a la historia, su historia. Eso no es joda. Hacen lo mejor que pueden con lo que tienen. Y les sobra. Cuando hay ganas de hacer algo, poco puede detener ese deseo. No hace falta tanto. Un grupo de payasos que quiere contar su historia. Que tampoco es poco. Pasan de una máscara a la otra, y lejos de ocultar su identidad, revelan su humanidad.